Hidra de Lerna, 1998 (Fidel Goás Mendes, Oleiros, 1957)
Esta escultura rememora uno de los trabajos de Hércules. En pago por haber cometido crímenes horrendos, el Oráculo de Delfos exigió al héroe que entrara al servicio del rey Euristeo. Este, a su vez, le encomendó la realización de doce trabajos. El primero y bien conocido fue matar al león de Nemea y el segundo, a la hidra de Lerna, un despiadado monstruo marino cuyas múltiples cabezas tenían la capacidad de regenerarse y reproducirse si eran cortadas. Con la ayuda de su sobrino Yolao, Hércules pudo vencer al monstruo y utilizó su sangre como veneno para sus flechas.
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